Crecimiento de agresiones sexuales entre adolescentes pero el Gobierno, ¿qué hace?

mano_niña
Comparte ese artículo

En una semana hemos podido ver en medios de comunicación varios casos de agresión sexual entre menores, por ejemplo, la violación de una niña de 11 años en un Centro Comercial cometida por varios menores, algunos de ellos en edad comprendida entre 12 (inimputables) de 14 años en la cual se podría haber actuado antes, dado que la propia víctima solicitó ayuda a un vigilante de seguridad y este la ignoró, por lo que también debería ser imputado por omisión del deber de socorro, ya que la propia víctima de 11 años estaba en peligro y en una circunstancia grave, tipificado en el Código Penal.

Por otro lado, salta otra noticia investigando una presunta agresión sexual por parte de cinco menores a compañeros de clase, no han cumplido 14 años, por lo que son inimputables.

Posteriormente, un adolescente detenido como presunto autor de una agresión sexual a una menor, según he podido ver en diferentes medios, la menor se trataba de su vecina, la familia interpuso la denuncia por la presunta agresión sexual, ha sido puesto a disposición de la Fiscalía de Menores.

Con esto quiero indicar una pequeña parte de una oleada de delitos de índole sexual, entre otras además de “la nueva moda” de grupos de Telegram para difundir videos en los cuales se visualizan “quedadas” entre adolescentes para darse palizas, es decir, difundir violencia además de difundir en otros casos agresiones sexuales.

¿Qué pasa? Las conductas agresivas están siendo un componente de riesgo muy preocupante en los últimos años, pues con el término de violencia sexual, el valor que refleja la disfunción del un mecanismo de conductas delictivas y criminales, fijando el objetivo en infringir daño a otras personas desde una edad tan temprana. Como consecuencia siguen teniendo un factor de riesgo cultural, social y ambiental que ayudan al crecimiento que estamos viendo en estos años y sin miramientos de frenar en este caso, pues el gobierno se dedica a publicar videos promocionales de entablar conversaciones sin tabú respecto al sexo.

Con ello quiero decir, los menores tienen un acceso a internet demasiado amplio donde les influye en buena parte las relaciones sexoafectivas, siendo un punto importante que se lleva mencionando desde hace tiempo, pero el propio Ministerio lo manipula para después trasladarlo a un terreno totalmente diferente, además de seguir dándose golpes de pecho por la lucha de los derechos, sinceramente, mucha palabra y poca práctica, poco trabajo y muchas vueltas, a los hechos nos remitimos.

Con lo cual, los agresores que observamos dentro de un perfil delictivo en adolescentes, dentro de la sociedad con la tendencia acentuada y notoria, están siendo de forma sistemática con conductas desviadas, por ejemplo, en este caso, indicamos el acceso a internet con facilidad y sin límites siendo muy pequeños. Así que, crecen más y más los delitos sexuales junto con las agresiones en grupo, una metodología que siguen como patrón: “Salimos de fiesta, bebemos alcohol, cometemos una agresión sexual, nos da igual”.

El porcentaje de crecimiento es abrumador, los casos de menores que cometen delitos de agresiones sexuales es muy alto, obviamente la concienciación que existe actualmente, ayuda a que las víctimas o las familias interpongan una denuncia. Pero, si la propia ministra de igualdad es una abanderada de la protección de las mujeres, no veo que mencione o trabaje para mejorar este problema tan grave que tenemos social de primera magnitud.

Se ha normalizado y generalizado en la sociedad actitudes dentro del ámbito social, familiar, educativo y cultural que no se está abordando, sin embargo, se fomenta el acceso a internet y por ende estos a la pornografía sin beneficios en las relaciones afectivas entre los adolescentes, creciendo dentro de diferentes mecanismos y relaciones que comienzan en edades más tempranas.

Un caracterización general y principal de un agresor sexual es que el individuo se considera y se siente como ser superior, actuar ejerciendo la fuerza considerando a su víctima inferior y débil, por lo tanto, una relación sexual se basará en el sometimiento y no en el consentimiento, como se pueden observar en la pornografía.

Como conclusión, se debe diferenciar entre los diálogos de sexualidad, y conllevarlo a la sexualidad afectiva real, donde se trate la autoestima, derechos de las personas, valores y respeto.

Esto no solo se define y se defiende dentro de las familias, pues nos encontramos en muchos casos, la falta de conocimiento necesario para poder establecer dichos parámetros y representa un aspecto de gran importancia en la formación integral de los menores y adolescentes, del mismo modo que deben tener el conocimiento biológico, se deben explicar los procesos de construcción de identidad de las personas y de su género con el objetivo de entender la sexualidad como una comunicación normal y humana, pero para ello se deben establecer unas bases con las edades que puedan entender y crecer con la posibilidad de construir su propia personalidad, además de establecer unos límites sin miedo, un niño de ocho años no puede tener el mismo acceso a internet que un adolescente, porque dicho menor, aprenderá y evolucionará muy posiblemente transformando la información que está adquiriendo sin límites creando un comportamiento inadecuado en muchos casos.

Os dejo este planteamiento; la información acerca de estos temas sin embargo sigue siendo muy escasa, así que me hayo en la situación de replantearlo, ¿quiénes se benefician de esta escasez de información? ¿Quiénes son los que realmente transmiten o difunden o cubren los delitos de índole sexual en menores? Aún habiendo visto en la última semana decenas de noticias acerca de los delitos sexuales, no existe información suficiente para plantear o intentar abordar el tema porque se escudan en que son menores para no emitir la prevención, tratamiento y protección adecuada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

error: Contenido protegido por derechos de autor c) 2021 h50. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de este contenido sin su previo y expreso consentimiento.