Reserva de plazas para mujeres policía

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Olga Maeso*

Aprovechando que tengo a mis mellizos de 3 años en el colegio, he cogido el ordenador para escribir un artículo que tenía en mente desde hace bastante tiempo.

Si me sincero con vosotros, este es sin duda uno de los artículos más difíciles que voy a escribir, porque soy consciente de que la mayoría de personas, creen que hombres y mujeres ya estamos en situación de igualdad y que se deben dejar las cosas tal cual están.

En mi caso opino de manera distinta, pienso que todavía queda mucho trabajo por hacer para que llegue esa ansiada igualdad, y probablemente si todo va bien y si trabajamos conjuntamente para alcanzarla, la igualdad la acabarán disfrutando las siguientes generaciones.

En mis artículos tiendo a extraer información del pasado porque en la mayoría de ocasiones nos acaba mostrando que somos el resultado de nuestras anteriores generaciones. Como dijo SIDDHARTA GAUTAMA (BUDA) “Si quieres conocer tu pasado, mira tu presente, que es su resultado. Si quieres conocer tu futuro, mira tu presente, que es su causa”.

Para ello te pido que retrocedas conmigo en el tiempo solo unos años, concretamente 60 años. En esa época la mujer dependía completamente del hombre. Si estaba casada, debía pedir autorización a su marido para todo. Cosas que hoy en día nos parecería algo impensable, en aquella época y para esas generaciones era su normalidad. Si la mujer quería hacer cualquiera de los siguientes trámites necesitaba el consentimiento de su marido: trabajar, abrir una cuenta en el banco, comprarse un coche…

Los que nacimos en los años 80 hemos tenido unos padres que se criaron con ese ejemplo.

Aprendemos por imitación, gracias a nuestras neuronas espejo que se activan y captan el entorno y los comportamientos de las personas con las que nos relacionamos. Es decir, que ellos tuvieron un modelo muy marcado, del rol del hombre y el rol de supeditación de la mujer.

En las escuelas, en los diferentes medios de comunicación, no hemos tenido mujeres referentes en distintos ámbitos, y eso ha marcado en el que tanto hombres como mujeres pensemos que hay trabajos que son de hombres y otros de mujeres.

Esto es extrapolable a la situación actual. Si cojo un periódico deportivo, da la sensación que la mujer no realiza de manera profesional ningún tipo de deporte.

Si elijo leer un artículo en una revista de jóvenes, sigue saliendo muy marcado el rol de dependencia que tiene que tener la mujer, si quiere gustar a los hombres con frases del estilo “Tu función es estar guapa para él” “A él le gusta llevar la iniciativa y sentir que te protege”.

Lo mismo si escuchamos según y que canciones en la radio, en la que las letras dejan mucho que desear.

Es decir, actualmente no solo nos ha afectado lo que llevamos arrastrando de generación tras generación, también nos sigue impactando todos los inputs que recibimos de los medios de comunicación y el entorno donde sigue habiendo esas diferencias.

Eso ocasiona que actualmente sigamos siendo una sociedad donde tanto hombres como mujeres seguimos siendo machistas.

De hecho mucha gente piensa, que cuando tomamos una decisión o valoramos algo, lo hacemos conscientemente, y que por eso hemos dejado de ser machistas. Nuestra lógica nos indica “que si yo creo que no soy machista, tomo las decisiones conscientemente en base a mis propios pensamientos”, pero los estudios nos demuestran lo contrario.

Como dijo el Doctor A.K. Pradeep: “El 95% de las decisiones que tomamos se gestan en el subconsciente”.

¿Qué información tenemos en el subconsciente y cuando la hemos ido almacenado? Los estudios demuestran que durante nuestros primeros 6 años de vida es cuando nuestro cerebro recibe la máxima información para entender el entorno. Todo lo que vamos observando en nuestro ambiente, comportamientos, conductas, escuela, normas, cultura, lo que nos dicen, lo que vemos, lo que oímos se guarda directamente en nuestra mente subconsciente sin ningún tipo de filtro.

En definitiva, tal como nos indica Bruce H. Lipton, biólogo celular.

«Generalmente, creemos que dirigimos nuestras vidas con nuestros deseos y aspiraciones, pero la neurociencia revela un hecho sorprendente: nuestra mente consciente creativa solo dirige nuestras vidas en un 5%. El 95% del tiempo, nuestra vida es controlada por las creencias y hábitos que están programados en nuestra mente subconsciente»

Eso conlleva que en cualquier proceso selectivo las personas que están haciendo la valoración, están decidiendo no de manera consciente sino de manera subconsciente , afectados por un tipo de educación que hemos recibido machista, porque no nos equivoquemos un cambio de leyes no equivale a un cambio de creencias, ni de mentalidad, para llegar a eso debemos trabajar todos conjuntamente en la educación de nuestros hijos y en nuestra propia reeducación, siendo conscientes que hay mucho trabajo por hacer.

Hace poco leí que los profesores en las escuelas decían que no había ejemplos de referentes femeninos en los libros. ¿Creéis que eso tiene algún tipo de afectación en la juventud? Por supuesto que si, si yo como alumna estoy sentada en mi silla, solo escucho ejemplos de comandantes varones que fueron a la batalla y de científicos hombres que hicieron descubrimientos a lo largo de toda la historia, haré la asociación directa que las mujeres solo valemos para unas profesiones determinadas.

Lo triste es que aunque no se hable de ellas, si han habido grandes mujeres, silenciadas por la historia, guerreras y científicas que han obtenido grandes logros y a continuación os mencionaré solo alguna de ellas:

Artemisia I de Caria , en el año 480 a. C. reina y destacada comandante que comandó las tropas auxiliares del rey Jerjes durante la Segunda Guerra Médica. Participó en las batallas navales de Artemisión y Salamina, demostrando ser una gran guerrera, comandante y estratega.

 

TOMIRIS (siglo VI a.C) Fue la reina de los masagetas, una confederación de pueblos situados en Asia Central (actual Kazajistán). Aquí tanto las mujeres como los hombres cazaban y luchaban desde muy jóvenes. Había mujeres guerreras de alto rango y Tomiris era la más representativa. Tomiris venció a las tropas del rey persa en el campo de batalla.

HERMANAS TRUNG (12-43 d.C): Son consideradas dos heroínas nacionales de Vietnam.  Las hermanas Trung recibieron entrenamiento miliar por parte de su padre. Lideraban su ejército de hombres y mujeres, a lomos de sus elefantes de guerra.

CYNANE (323 a.C):  Entrenada como cazadora y luchadora desde pequeña, se convirtió en comandante militar y destacada guerrera. «Era famosa por sus conocimientos en las artes militares: conducía ejércitos, y en el campo de batalla cargaba la primera, guiando a sus soldados.» (Polieno).

Ada Lovelace (1815 – 1852)

Es considerada como la primera programadora de ordenadores de la historia y la persona que inició el sistema informático que conocemos en la actualidad.

 Marie Curie (1867 – 1934)

Marie Curie fue una de las mujeres científicas pioneras en el estudio de la radiación. Sus investigaciones le llevaron a descubrir dos elementos, el radio y el polonio. Fue la primera mujer en recibir un Premio Nobel, en 1903 de Física y en 1911, recibió un segundo Premio Nobel de Química. Se convirtió así en la primera persona en recibir dos Premios Nobel en categorías distintas.

Rosalind Franklin (1920 – 1958)

Rosalind se doctoró en Química en la universidad de Cambridge. Trabajó en el laboratorio de King’s College, en Londres, donde logró hacer una fotografía que mostraba la doble hélice del ADN y se lo mostró a dos compañeros investigadores. Los tres juntos publicaron el descubrimiento en la revista Nature. En el año 1962 los tres investigadores recibieron el Premio Nobel por el descubrimiento de la doble hélice del ADN, aunque Franklin ya había fallecido.

Margarita Salas (1938 – 2019)

Fue una de las más notables científicas españolas, doctorada en Biología por la Universidad Complutense de Madrid. Una de sus principales contribuciones a la ciencia fue el descubrimiento del ADN polimerasa, que es el responsable de la replicación del ADN.

A parte de estas mujeres inspiradoras, hay muchos más ejemplos, que nos muestran que las distinciones que hacemos entre lo que puede llegar a hacer un hombre y una mujer no las marca la naturaleza, sino el propio ser humano.

Si en la actualidad no hay más mujeres policía es debido a diversos motivos, entre ellos están, primero el que solo nos permitieron acceder a partir del año 1980, segundo porque como ya hemos visto anteriormente todos y actualmente sigue siendo así, estamos muy condicionados/influenciados sobre qué profesión debemos ejercer y todavía la de policía sigue viéndose más de hombres que de mujeres.

Tercero porque faltan mujeres policiales referentes a las que las jóvenes puedan seguir.

Cuarto las personas que están en el proceso selectivo en la entrevista son profesionales, hombres y mujeres cuyas decisiones de manera inconsciente están afectadas por una educación y unos inputs diarios, donde nos siguen marcando quién sirve para qué.

Habían hecho un estudio que mostraba que, en el caso de no hacerse una reserva de plazas para mujeres, se tardaría más de 40 años en conseguir esa igualdad en esa profesión, porque recordemos que las leyes han cambiado, pero la mentalidad de las personas no.

La única manera de cambiar lo más difícil que hay, la manera de pensar de la gente, es a base de vivir una nueva experiencia. Cuando se vea que hay un porcentaje equitativo y que todo sigue funcionando de la misma manera que antes o incluso mejor, entonces será cuando las nuevas generaciones crezcan teniendo claro que la profesión de policía, es tanto de hombres como de mujeres.

A veces, los cambios son necesarios para equilibrar una situación de desequilibrio que llevamos sufriendo desde hace miles de años.

Como siempre, gracias por leerme.

Olga Maeso

Foto portada: mujer policía SWAT de Shanghai.

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