En un escalofriante incidente en Mijas, Málaga, un hombre de 45 años fue víctima de un violento ataque mientras paseaba a su perro. Un individuo encapuchado se cruzó en su camino, y sin mediar palabra, le clavó un cuchillo en la cabeza. La hoja quedó incrustada en su cráneo, dejando a la vista una parte del cuchillo y del mango.
A pesar de la gravedad de la situación, el hombre permaneció consciente. Rápidamente, alertó a los servicios de emergencia. La Policía Local y la Guardia Civil acudieron al lugar. Los sanitarios tomaron la decisión de no retirar el cuchillo y, en cambio, vendaron su cabeza para inmovilizar el arma. Luego, lo trasladaron de urgencia al hospital.
El agresor fue detenido, pero aún quedaba una parte peligrosa: extraer el cuchillo. Los médicos operaron al hombre de urgencia. Afortunadamente, no se encontraron más lesiones ni derrames internos. El motivo detrás del ataque sigue siendo un misterio. Aunque inicialmente se pensó que podría estar relacionado con su trabajo como conductor de grúa, esta teoría fue descartada.
El valiente hombre sobrevivió a este terrible episodio. Ahora, con una fisura en el cráneo y una chapa a modo de parche, se recupera en la unidad de cuidados intensivos (UCI). Su historia es un recordatorio impactante de la violencia que puede surgir en los lugares más inesperados.
