El Gordo de la lotería de Navidad de este jueves, el mejor regalo de la Navidad, sería que los fascistas, los autoritarios, los totalitarios, los autócratas, los que no respetan la separación de poderes y demás especímenes fueran apartados de la política por el pueblo español, que es donde reside la soberanía nacional de la que emanan los poderes del Estado, Legislativo, Ejecutivo y Judicial (art.1 CE). Los que dice llamarse progresistas han proferido todo tipo de improperios contra el Poder Judicial, por cumplir y hacer cumplir la Ley parando así sus tropelías.
Dichos “progres” son los mismos que hacen una defensa a ultranza de los regímenes de Venezuela, Nicaragua, Cuba, Rusia, China y una lista cada vez más larga, ya que el populismo y comunismo se vuelve a extender por todo el mundo, incluida Europa. Son a los que cuestionan la separación de poderes a los que habría que darles una patada democrática y retirarlos de la política con la fuerza de las urnas presenciales, no digitales, que curiosamente defienden e imperan en América del Sur.
Aquí en España, se discute si Sánchez actúa por ignorancia o mala fe. Ahora bien, si tienes medio millar de asesores nunca podríamos pensar que actúa por ignorancia por lo solo nos queda su mala fe, que admite que el Ejecutivo y el Legislativo están por encima del imperio de la Ley. Es muy grave que él, todopoderoso, y sus coaligados estén poniendo en peligro el Estado de derecho y por ende los cimientos de la democracia al no admitir sus reglas del juego. Arriesgará hasta el final, adoptará las medidas que sean necesarias para imponer su ley, sin importarle las consecuencias para el país, España, aunque el Tribunal Constitucional de haya tumbado su autoritarismo en las dos últimas ocasiones.
Después de derogar el delito de sedición y abaratar el delito de malversación, haciéndole un traje a la medida de los golpistas y malversadores. Incluso, fue aún más lejos cuando mediante enmiendas a la proposición de ley pretendía reformar la LOPJ y LOTC, vulnerando la Constitución que fue votada abrumadoramente por el pueblo español. Ya en su momento Chávez acusaba a la oposición de contrarrevolucionaria, fascista y golpista. Y, arremetía contra los jueces y la prensa, hasta que consiguió someterlos. Hoy son sus títeres.
A tal respecto, el artículo 122.3 de la Constitución Española establece que los cuatro miembros del poder judicial elegidos por el Congreso y otros tantos nombrados por el Senado, lo serán por mayoría de tres quintos. Y, el artículo 159.1 y 3, señala que los miembros del Tribunal Constitucional serán también elegidos por mayoría de tres quintos por un período de nueve años y se renovarán por terceras partes cada tres. Pienso que, al menos, la avalancha de sus asesores jurídicos lo deben tener claro. También Sánchez y la mayoría de los diputados y senadores. En realidad, lo que están buscando es que sus reformas se adapten literalmente a las exigencias de sus coaligados, sin importarles la demolición de las leyes orgánicas, que necesitan tres quintos de las Cámaras, en una maniobra que deja a la CE indefensa ante esta trampa. Todo vale. Son los caimanes de moqueta que lo intoxican todo. Los intereses partidistas priman sobre la Ley y el Derecho.
Decía Raúl del Pozo “vivimos el desnudo integral del Estado. El poder ejecutivo se comporta como una boa constrictor que intenta tragarnos enteros empezando por la cabeza. Hay un choque entre el Gobierno y los jueces, y la artillería retórica de Moncloa acusa a los magistrados de golpistas con toga que quieren dominar el legislativo. Una plaga de sicofantas y sofistas calumnian a los que apoyan la división de poderes”. Es un acoso y derribo al Estado de derecho, vamos, a la democracia. Todo ello a pesar de los tirones de orejas que les ha dado la UE respaldando al TC y reprochando a Sánchez que no haya consultado antes la reforma. Así, Christian Wigand dijo “Las reformas legales en los países de la UE deben contar con todos los sectores implicados”.
Autor: Manuel Novás Caamaño | Abogado
