Criminólogos, ¿dónde cabemos?

Nos encontramos ante un eslabón como una ciencia que es la Criminología que no resulta encajarle a la sociedad, administraciones, gabinetes, etc. pero si resultamos necesarios entrando en la búsqueda de nuestro cerebro encargado de llevar tareas que completamos por la ciencia multidisciplinar en la que estamos formados.

La Criminología no es solo una ciencia como tal, es un enlace, que completa, nutre y crea los saberes de la justicia, la sociedad, la educación y la evolución. Encontrar solo un punto de unión en nuestro trabajo no es fácil, pues tenemos un trabajo muy extenso, siendo necesario y demandado por la sociedad, pero lo escuchamos en silencio y tratamos de elaborar el camino correcto para la necesidad del punto concreto.

En mi caso, como criminóloga, tengo muchas funciones, pero cierto es que tengo especialidades en las que he ido encaminando mi trabajo como tal. Mi función entre ellas es informar a la sociedad y a los poderes públicos que es un delincuente, que es una víctima, cómo es el control social, que aporta todo en conjunto y cómo tratarlo desde la raíz del propio conocimiento.

Pero además no solo ahí es mi cometido, sino que, cabe la necesidad de cómo tratamos los criminólogos por ejemplo en proceso judicial, la necesidad de tratar y estudiar los procedimientos que requieran la objetividad de nuestra ciencia.

Tras estos últimos meses en los que hemos visto el crecimiento exponencial de casos de violencia de género, vicaria, homicidios y violencia sexual… en los cuales me hallo en mi circulo especializado de la materia, y es que, nuestra labor es llegar a conclusiones que los letrados que gestionen dichos procedimientos no podrán llegar, ayudamos a elaborar un camino tanto para el acusado como para la víctima, dejamos listo un proceso arduo y complicado, en puntos claves para resolver y además para facilitar tanto en las defensas como en el entendimiento y esclarecimiento en el propio juicio si fuese necesario. De hecho, muchos procedimientos han sido esclarecidos gracias a nuestra aportación criminológica, dejando claro y sin desmerecer la labor de otros compañeros que elaboran informes concretos para resolver y evidenciar pruebas presentadas por ejemplo.

Nos queda clara la exigencia de la sociedad hacia la justicia y la impunidad que se llevan a cabo por delitos que se están cometiendo, pero por este motivo, nos encargamos como he mencionando anteriormente las estrategias adecuadas que se deben llevar a cabo en procedimiento, siendo así la determinación de la existencia del delito e incluso concretar la probabilidad de la responsabilidad de un sujeto en el propio acto delictivo analizando todos los factores de riesgo, para poder trabajar en las futuras prevenciones. Con ello elaboramos los innumerables informes periciales y criminológicos que sean necesarios para afrontar cualquier procedimiento judicial.

Pongamos un ejemplo mediático:

Caso Dani Alves, ¿Cuál sería nuestra aportación? En el caso de una acusación por agresión sexual, nuestra función es estudiar, investigar e intervenir con nuestra aportación todo lo que se ha ido averiguando, con detalles claros y hechos que han podido transcurrir tanto de una parte como la contraria. Ya que el letrado trabaja en el aspecto jurídico, y nosotros aportamos el punto de vista pericial, valorando los detalles y los hechos ayudando en la defensa o en la acusación construyendo una cadena e hilo conductor del delito. Se debe mantener la presunción de inocencia y el respeto junto a la protección de la víctima, pues el entorno también sufre consecuencias negativas para ambos en este proceso.

Por ello, la elaboración de un informe Criminológico en determinados procesos tienen una gran relevancia, pero además, intentamos fuera de los tecnicismos que son necesarios dentro de un proceso judicial, que la sociedad pueda tratar de entender que no todo es lo que parece y que nosotros trabajamos para que no se emitan juicios sociales, debemos mediar en un proceso donde no cabe la confrontación ni la guerra, sino el tratamiento, pensar que cualquier persona podría cometer un delito leve o delito grave, y que este necesitará la ayuda para no reincidir, de ahí a nuestra gran labor desde el inicio de un proceso.

Para finalizar, mi llamamiento a: más criminólogos en administraciones, centros educativos, centros penitenciarios, gabinetes jurídicos, en medios de comunicación, etc… la divulgación de nuestra ciencia será la prevención del futuro.

Un artículo de Aixe Sela Almeida para h50 Digital