Tarragona vivió una jornada de alta tensión este martes tras un operativo conjunto de los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional contra la venta ambulante ilegal en las localidades de Salou y Reus. La intervención, que tenía como objetivo desarticular una red dedicada a la distribución de productos falsificados, derivó en enfrentamientos violentos entre un grupo de manteros y los agentes desplegados.
Según fuentes policiales, durante los registros en varios pisos y almacenes, algunos vendedores ambulantes reaccionaron con hostilidad, lanzando piedras y objetos contundentes contra los efectivos. El altercado dejó un saldo de tres agentes heridos leves y 19 personas detenidas. Además, varios vehículos estacionados en la zona sufrieron daños materiales.
El dispositivo, en el que participaron cerca de 300 agentes, permitió incautar una gran cantidad de mercancía falsificada, aún pendiente de cuantificación. Las autoridades han calificado la operación como un paso clave en la lucha contra las redes organizadas que operan en la Costa Dorada.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Salou ha convocado una reunión de urgencia para abordar la creciente tensión social en torno a la venta ambulante, un fenómeno que se intensifica con la llegada del verano y el aumento del turismo. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días.
