Carta abierta al Sr Pablo Iglesias.

Estimado gestor público:

Son momentos duros para este país, sufrimos la pérdida de seres queridos, a los que no podemos ni despedir, permanecemos encerrados en nuestros pisos, cumpliendo las normas impuestas en una situación jamás conocida y en breve, seguramente comenzaran más penurias dado que no podemos trabajar.

El gobierno, nuestros “gestores públicos”, no han satisfecho las necesidades de recursos que precisan sectores primarios como la sanidad, seguridad o transporte, están solos, a su suerte, sin una elemental mascarilla para protegerse.

Vergonzosas imágenes y de un profundo calado, las de esos sanitarios arriesgando su vida cubiertos en bolsas de basura,  ¿las has visto Sr Iglesias?.

El problema de este aborregado país es su agradecimiento a la limosna y vivir en una profunda siesta.

Y alguien, el que debería ser gestor eficaz de impuestos, aprovechando la situación, nos recuerda que la propiedad privada está sujeta al interés general.

No es el momento, ni la situación. Dedíquese a gestionar con eficacia los recursos que ponemos a su disposición, los impuestos que ya le pagamos.

Es lamentable que un administrador acuda a nuestros escasos bienes para solucionar problemas. Tenga en cuenta que a usted se le paga (muy bien, por cierto) para gestionar con eficacia, no para asustar con confiscaciones.

Por otro lado, se olvidó usted de leer el art 33 previo al que argumenta, le recuerdo que la interpretación de nuestra gran C.E, esa que nos permite a todos vivir en libertad, debe hacerse en su conjunto.

Artículo 33 de la Constitución Española:

1. Se reconoce el derecho a la propiedad privada y a la herencia.
2. La función social de estos derechos delimitará su contenido, de acuerdo con las leyes.
3. Nadie podrá ser privado de sus bienes y derechos sino por causa justificada de utilidad pública o interés social, mediante la correspondiente indemnización y de conformidad con lo dispuesto por las leyes

No nos asuste más de lo que ya estamos  y deje en paz nuestra pobreza.